La creadora del listón rosa Evelyn Lauder murió el 12 de noviembre del 2011. En 1989 fue diagnosticada con cáncer de mama, lo que gatilló un activismo por la salud femenina que culminó con la creación de su fundación y de su muy conocida campaña internacional de las cintas rosadas, desgraciadamente en 2007 recibió un nuevo diagnóstico, cáncer ovárico, que resultó ser fatal.
De todos los éxitos y triunfos que alcanzó en sus 75 años, Mrs. Lauder, como la llamaba todo el mundo, ninguno la ponía tan orgullosa como ese. La fundación se convirtió en su pasión y, ahora, en su gran legado.
La vida de Evelyn no siempre fue tan feliz, hija de una familia austriaca refugiada en Nueva York en los tiempos del nazismo, uno de sus más traumáticos recuerdos –escribió The New York Times en su obituario– fue su llegada a Inglaterra, la primera parada de su escape, donde vivió separada de su madre durante un largo tiempo. Una vez en Nueva York, la familia adquirió una tienda de ropa que después de un tiempo se convirtió en una mini cadena de cinco boutiques.
“Siempre fui muy fuerte”, señaló Evelyn en una entrevista. “Tuve una niñez que fue más difícil que la de la mayoría, y eso me dio una fortaleza especial”.
Aunque vivía en un fabuloso departamento en el Upper East Side de Manhattan, rodeada de exquisitas pinturas de Picasso, Braque y Léger, y a través de su matrimonio con Leonard Lauder –hijo de la legendaria empresaria Estée Lauder–, pertenecía a uno de los clanes más poderosos y conocidos de la ciudad. Evelyn Lauder nunca jugó el rol de privilegiada socialité. Armada con un fuerte carácter y un espíritu noble y decidido, se abrió espacio primero entre los Lauder –una tarea nada fácil, considerando el conocido temperamento de la matriarca– y luego en la empresa familiar, donde dirigió el área de nuevos productos y marketing y la división de fragancias, entre otros cargos.
En 1989 le diagnosticaron cáncer de mama y fue entonces cuando comenzó su lucha.
En 1992 Alexandra Penney y Evelyn Lauder trabajaban en la segunda edición anual de la Concienciación sobre el Cáncer de Mama. Empezaron con la idea de hacer lazos y obtener el apoyo del gigante de cosméticos para distribuirlos a través de las tiendas en Nueva York. Evelyn Lauder se comprometió a distribuir los lazos por todo el país, sin embargo, hasta el momento no se había tomado una decisión entorno al color del mismo.
Charlotte Hayley, de 68 años, que había luchado contra el cáncer de mama vendía lazos de color melocotón hechos a mano en su salón.
A los lazos les acompañaba una tarjeta que decía:
“El presupuesto anual del instituto nacional del cáncer es de 1.8 billones de dólares estadounidenses y solamente el 5 % está destinado para la prevención del cáncer. Ayúdanos a despertar a nuestros legisladores y a los Estados Unidos, usando este lazo”.
Su mensaje se expandió rápidamente, Penney y Evelyn quisieron trabajar conjuntamente con ella. Sin embargo Hayley rechazó la oferta argumentando que ésta tenía un propósito demasiado comercial.
Después de discutir las oportunidades con Lauder, Hayley y los abogados, decidieron ponerle un “nuevo” color. El nuevo color de la cinta, sería el rosa y se convertiría en un símbolo internacional de la concientización del cáncer de mama.
Comenzó como algo pequeño con Lauder y su esposo, Leonard, financiando gran parte de los lazos entregados a mujeres en mostradores de cosméticos en centros comerciales estadounidenses para recordarles que se hicieran un examen de seno.
Cuando fue lanzada, era tan poco conocida que algunos pensaron que simbolizaba la lucha contra el SIDA.
Otros activistas también han usado el lazo…
– La historia de un lazo como símbolo de conciencia se remonta a una canción “Round her Neck She Wears a Yeller Ribbon”.
– En 1979, Penney Laingen, esposa de un prisionero en la Guerra del Golfo, se puso un lazo amarillo inspirada por la canción para pedir la liberación de su esposo. Muchos se solidarizaron y también llevaron un lazo amarillo. Era la primera vez que un lazo se hacía mediático.
– En 1990 el grupo activista Visual AIDS que luchaba contra el SIDA tiñó el lazo de rojo (“porque es el color de la pasión”). Jeremy Irons lo llevó en los Tony Awards.
Los lazos se convirtieron en el símbolo de cualquier causa solidaria. The New York Times declaró el año 1992 como “The Year of the Ribbon.” (El año de los lazos).
– La primera vez que se utilizó un lazo rosa fue a finales de 1990 durante la “Race for the Cure” (Maratón por la Cura) de Nueva York que organiza la Susan G. Komen Breast Cancer Foundation. Este primer gesto no caló, el gesto era la carrera, el lazo era un detalle más. Hacía falta que el lazo fuera el protagonista.
– Tres años después de distribuir el lazo rosa, una azafata que vio la cinta en la solapa de Lauder, le dijo: “Sé que es para el cáncer de mama”, a partir de ahí recordaba la fundadora, “Estaba en todas partes”.
El número de compañías que se han comprometido a concienciar sobre el cáncer de mama se ha incrementado a lo largo de los años, sumándose a diferentes eventos y actividades durante el mes de octubre, la mayoría en asociación o a beneficio de fundaciones u organizaciones civiles.
Alrededor del mundo, monumentos famosos son iluminados con una luz color rosa para atraer la atención (tal como con el lazo rosado) hacia la importancia del diagnóstico a tiempo del cáncer de mama y a favor de la investigación, para encontrar maneras de curarlo y prevenirlo.